VIVIR LA VIDA EN UN MOMENTO
En un baile el tiempo se ralentiza,
se para entre tu mirada y la mía;
todo desaparece a nuestro alrededor
mientras con las manos entrelazadas
nos entregamos dejándonos llevar
siguiendo el compás.
se para entre tu mirada y la mía;
todo desaparece a nuestro alrededor
mientras con las manos entrelazadas
nos entregamos dejándonos llevar
siguiendo el compás.
Podemos disfrutar de tantos y tantos bailes mientras esperamos que suceda lo que deseamos, lo que hemos planeado... Sin embargo, la mayoría de las veces nos perdemos lo mejor de la vida por estar aguardando algo o a alguien y no disfrutar esos momentos intermedios que tal vez sean los más gratos, los más recordados, los que nos provocan una gran sonrisa. Seguramente, lo mejor de la vida sean esos bailes inesperados.Creo que me daría seguridad bailar contigo, Adal… Me encantaría.
posted by Topacio at 4:30 a. m.
5 Instantes:
Que razón tienes.
El secreto está en disfrutar de esos momentos intermedios.
Deberíamos intentarlo al menos.
Que bonita película.
Besos.
Es una pena que vivamos la vida desperdiciando bailes. Esos bailes que, a su vez, nos darían vida.
La felicidad es el instante.
Besos
el secreto está en saber disfrutar todos y cada uno de los momentos. No esperar un instante, porque un instante no llena...
Qué bella entrada Ana!
me ha emocionado!
hay mucha sabiduría en las palabras escritas!
sabes que no hace mucho la muerte anduvo en mis cercanías llevándose la savia joven de alguien a quien amaba
y uno toma conciencia de los momentos perdidos
de los momentos postergados
por vaya a saber qué cosa más importante
sin saber que esos momentos son únicos e irrepetibles
que siempre seremos lo que recordamos
que en el debe y haber de nuestra vida
hay faltantes porque decidimos no vivir un instante, que quizás sirva para abrigarnos el día de mañana cuando la soledad lascere el alma.
Si Ana,
a mi también me encantaría bailar contigo!
Desde un lejano Buenos Aires que siempre huele a Tango
te mando el cariño de Siempre!
Adal
Ana
te cuento que el tango que se escucha en el baile es de Gardel y se llama
"Por una cabeza"
Gardel era un aficionado entusiasta de las carreras de caballos en hipódromos
y aquí cuenta mas o menos
esa afición al turf
con un amor que se le ha negado.
Por una cabeza
de un noble potrillo
que justo en la raya
afloja al llegar,
y que al regresar
parece decir:
No olvidéis, hermano,
vos sabés, no hay que jugar.
Por una cabeza,
metejón de un día
de aquella coqueta
y risueña mujer,
que al jurar sonriendo
el amor que está mintiendo,
quema en una hoguera
todo mi querer.
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
qué importa perderme
mil veces la vida,
para qué vivir.
Cuántos desengaños,
por una cabeza.
Yo jugué mil veces,
no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar
me hiere al pasar,
sus labios de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras,
se acabó la timba.
¡Un final reñido
ya no vuelvo a ver!
Pero si algún pingo
llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero.
¡Qué le voy a hacer..!
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